Los abogados buscan una colaboración entre España y Marruecos

La Península Ibérica ha sido desde tiempos inmemoriales receptora de muchísimas culturas y civilizaciones, dada su gran situación geopolítica era un lugar de gran interés estratégico para el dominio del resto de Europa. Aunque algunas de esas culturas fueron desapareciendo y extinguiéndose con el paso de los siglos, nuestro país iba quedando marcado por ellas y recogiendo y asumiendo muchas de sus tradiciones, conformando lo que actualmente somos. Por ello, no es de extrañar que también en la actualidad España sea un crisol de culturas, en el que se han establecido gentes de diferentes razas, religiones o nacionalidades, que se han sentido cómodas en un país que quizá en parte les seguía recordando a su país de origen.

Uno de los colectivos más nutridos es posiblemente el colectivo marroquí, puede que por su cercanía geográfica, y aunque las relaciones entre ambos países no siempre han sido buenas, no hemos de olvidar que ambas culturas se han influenciado a lo largo de la historia. Aún así, actualmente las diferencias son muy notorias en algunas áreas, sobre todo cuando hablamos de legalidad vigente. Podemos decir que, al menos en las figuras más relevantes del derecho, ambas coinciden pues un robo es un robo, aquí y allí, por ejemplo. Pero en otros casos, las líneas que delimitan ciertas figuras pueden ser divergentes, como en el matrimonio, la separación de los cónyuges, el divorcio, sus efectos y formas, etc.

En España, el desconocimiento de la Ley no exime de su cumplimiento, por lo que a veces se puede estar incumpliendo la misma al llevar a cabo, o no, ciertas acciones que en Marruecos pueden estar reguladas de diferente forma. Con el objetivo de facilitar la integración a los inmigrantes marroquíes en España, han comenzado a surgir asociaciones como la Asociación de Abogados de Origen Marroquí en España y en el Mundo, cuyos fines persiguen la integración plena de los marroquíes en nuestro país y la defensa de sus derechos ante los posibles abusos que se puedan cometer contra ellos. Este colectivo afincado en Almería, pero con socios en diversas ciudades como Madrid o Barcelona,no se queda simplemente en la defensa de sus compatriotas aquí. Entiende que existen otras necesidades que pueden ayudar a cubrir, y esto hace que sus aspiraciones sean también las de poder colaborar como órgano consultivo con nuestras instituciones públicas, o incluso privadas, en otros aspectos de la vida jurídica o incluso social de su comunidad. Su meta es la de conseguir establecer lazos con nuestro país y con las comunidades de acogida, favoreciendo así un diálogo entre ambas partes con el que sentar las bases de un futuro libre de xenofobia, racismo y discriminación.

Pero por supuesto no se olvidan de la existencia de españoles que han establecido su residencia en Marruecos, por los que igualmente se interesan, ofreciendo con el hermanamiento de los colectivos la posibilidad de brindar ayuda para que su integración allí sea lo más plena y satisfactoria posible, apoyándolos y asesorándolos en todas aquellas inconveniencias que pudieran surgirles. Al igual que ellos quieren sentirse parte de nuestro país, también quieren que si nosotros vamos allí podamos sentirnos parte de su país, un fin muy loable pero que exige que se unan esfuerzos por ambas partes, además de que existan apoyos institucionales por parte de los gobiernos de ambos países. Es el momento de dejar de lado guerras estériles y abogar por una unión y un hermanamiento entre nuestras culturas, y esperemos que ello suceda muy pronto.