Okupas

Sinceramente, hablar de okupa con "k" nunca me ha gustado. Una persona que se mete en el inmueble de otro (da igual si es de un banco o un particular), es alguien que está conculcando el derecho a la propiedad privada que, para nosotros, es sagrado.

Este okupa puede ser condenado por un delito de usurpación de bienes inmuebles. Las penas no son gran cosa y, en realidad, lo que quiere el dueño del inmueble es que el usurpador sea expulsado lo antes posible y eso no se consigue.

El caso es que, a través del turno de oficio, nos tocó hace poco la defensa de una pareja de okupas. Este tipo de asuntos son muy comunes.

Cuando estudiamos la documentación nos dimos cuenta de que había un defecto en la identificación del inmueble y en la posterior identificación de los ocupantes por la policía. Decidimos que esta sería la línea de defensa, ya que poca cosa se puede hacer normalmente.

Finalmente, en el acto del juicio, hicimos ver que los que allí estaban siendo denunciados podían no tener nada que ver con el inmueble cuya ocupación se estaba denunciando. Ante la sombra de duda, Su Señoría les absolvió "in voce". Es decir, dictó Sentencia en el mismo acto y les declaró no culpables del delito de usurpación.

Escribimos este post para "aviso a navegantes". Si es un denunciante, es preciso que la denuncia esté bien confeccionada, con plena identificación de los denunciados y del inmueble ocupado. Si es denunciado es preciso buscar minuciosamente los errores que pueda tener la denuncia.

Sí, por increíble que parezca, somos abogados y defendemos los intereses de aquellos que nos contraten, siempre que queramos asumir el encargo y entendamos que tienen viabilidad. Esta es una de las grandezas de nuestra profesión, poder estar en los dos lados del espejo, porque nosotros no juzgamos, no decidimos, sino que informamos a nuestros clientes, les ayudamos a tomar decisiones que sean lo más adecuadas a su vida, les acompañamos en procesos de tomas de decisiones, proyectos y empresas para que no tengan la decisión de estar haciendo de funambulistas sin red.