¿Debo asumir, como arrendatario, el coste de pintar el piso cuando lo deje?

El pasado mes de 1 diciembre 2014 dejé el piso en el que estaba alquilado durante tres años en Madrid.


Cuando entré, no estaba ni mucho menos recién pintado. No le comenté nada a al arrendador ya que lo que necesitaba era una vivienda urgente y no quería ningún tipo de líos ni problemas a la hora de firmar el contrato. El piso estaba en blanco. Al entrar y dado el estado de las paredes, pinté las paredes del salón de un tono beige claro y pinté el dormitorio de blanco (color original). Ahora el arrendador me quiere retener una parte de la fianza ya que dice que el color beige claro del salón no le gusta y que tengo que asumir yo el coste de repintar de nuevo el piso, ya que a los nuevos inquilinos tampoco les gusta.


En la entrega de llaves, el casero ya me dijo que las paredes del salón habían cambiado de color, a lo que yo le comenté que lo había pintado (en beige claro) porque estaba la pintura blanca original en mal estado.


En el documento de entrega de llaves, hizo constar "Queda pendiente por ver el tema de la pintura de la casa que la encontramos pintada de un color que no satisface a la propiedad. Si se alquila con ella así, no se cobrará cantidad alguna al arrendado".


En realidad pone "casa" pero lo único que está cambiado de color son las paredes del salón (ni siquiera el techo).


Ayer me envió un escrito diciendo que los nuevos inquilinos quieren la casa pintada y de ahí que me diga que me quiere cobrar 800 euros por ese motivo.


Yo sinceramente veo que ella ha visto la oportunidad de que alguien (yo como ex inquilino) le pinte la casa gratis. Y desde luego no estoy dispuesto, si acaso las únicas partes que están cambiadas de color (paredes de salón).


Y de ahí mi duda si estoy en derecho de decir que soy yo el que le compra la pintura pero que lo pinten ellos o bien que me encargo yo de pintarlo a blanco de nuevo. O bien negarme a que me repercuta ningún dinero por eso.



Pero como hoy voy a hablar con él, le voy a proponer que yo le compro la pintura blanca para que pinten las paredes del salón que las pinté en otro color. A ver qué me dice. Pero desde luego lo que no voy a aceptar es que me diga que tengo que pintar el piso entero cuando lo único que he cambiado ha sido las paredes del salón (todos los techos y el resto de estancias siguen estando blancos que es como estaban cuando entré).


Tampoco voy a aceptar que me cobre la mano de obra por repintar el salón, yo le compro el material (la pintura) y que se lo pinten ellos...


Pero no sólo eso, si no que de mi propio dinero le repinté la terraza en blanco (es el color original), le arreglé la campana extractora que estaba rota, pinté todo el dormitorio de blanco (es el color original), le tuve que instalar y colgar unos muebles de la cocina que me envió desmontados, le he pagado durante tres años un seguro que tiene para la caldera (servigas) y todo eso de mi propio dinero como inquilino cuando entiendo que todas esas mejoras son competencia del arrendador.


Y ahora me viene con la gaita de que no le gusta el color beige que tienen las paredes del salón... y que por eso le tengo que pintar toda la casa.


¿Puede hacerme esto? ¿Pinto yo el piso al entrar y tengo que repintarlo al salir? Me parece un abuso por parte del arrendador.


Gracias. Saludos.