Mucho que celebrar: Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia

El día 17 de mayo se conmemora una de las efemérides más importantes en cuanto al reconocimiento de los derechos de las personas. Se celebra ni más ni menos que el día 17 de mayo de 1990 la Organización Mundial de la Salud dejó de considerar este tipo de orientaciones sexuales o disforias de género como una enfermedad mental, pasando a ser consideradas como una opción más en la vida de cada cuál. Este hecho, por desgracia, no hizo que automáticamente desapareciesen los problemas, burlas, malos tratos e incluso muertes que afectan a este colectivo, únicamente por tener diferente orientación sexual. Al fin y al cabo, todos somos personas y deberíamos tenerlos mismos derechos, sin importar sexo ni orientación sexual, pero ¿es esto así? ¿Se ha llegado por fin a una tolerancia y convivencia pacífica entre todas las personas? ¿Se ha dejado de señalar "al diferente"?

No, no se ha dejado de señalar "al diferente", no hay convivencia totalmente pacífica y todavía queda gente que no es capaz de entender que existe la diversidad de opiniones y sentimientos, y que cada cuál con su vida y su cuerpo puede hacer lo que le plazca. Esto lo demuestran los resultados de un estudio realizado por TvTresearchproject (2016) "TransMurderMonitoringresults: TMM TDV 2016 Update", Transrespect versus TransphobiaWorldwide. New (TvT)". El estudio, que está en inglés, refleja en una serie de tablas las cifras de las muertes reportadas de trans, pues existen muchas ocasiones en las que no se denuncian las muertes o países que no reflejan estos datos,en todo el mundo, siendo el estudio fechado entre enero de 2008 y diciembre de 2015. Cifras poco alagüeñas que parece que no terminan de bajar, siendo la cifra total de trans asesinados conocidos en ese periodo de años de 2016, perteneciendo tan sólo al año 2015 la escalofriante cifra de 269 muertes. Entre los continentes con peores datos se encuentran los países sudamericanos, en los que se reportaron un total de 1.573 de esas muertes, Asia en el que se tiene constancia de 179, así como EEUU en dónde se reportaron un total de 132 de ellas. Las muertes en Europa en ese periodo de años es ligeramente inferior (112) aunque no por ello menos importante. En España se han contabilizado 8 de ellas, una cifra por suerte, muy por debajo de las escandalosas cifras de Turquía (41) e Italia (33). Aunque cifras menores aún experimentan países como Portugal, dónde únicamente se ha reportado una víctima, que fue asesinada en 2008.

Derechos para todos

En concreto en nuestro país los derechos de estos colectivos se han visto poco a poco mejorados desde la penosa ley de vagos y maleantes del periodo franquista a la libertad actual de no ser juzgados, al menos jurídicamente por su condición sexual, aunque todavía no se ha erradicado el juicio moral de algunas personas. En cualquier caso, poco a poco se han ido aumentando sus derechos de forma considerable, llegando en la actualidad a tener derecho a contraer matrimonio entre personas del mismo sexo y a poder cambiar el nombre en el registro civil a las personas con disforia de género, aún cuando no se hayan sometido a una operación de cambio de sexo.

La ley de vagos y maleantes, que criminalizaba la homosexualidad, fue sustituida en agosto de 1970, aún dentro de la dictadura, por la ley sobre peligrosidad y rehabilitación social y la ley del escándalo público, unas leyes no menos restrictivas y que siguieron criminalizando los llamados por ellos "actos de homosexualidad", incluso ya entrada la democracia, aunque ya entonces con poco aplicación práctica. En 1979 se modifica por el gobierno la ley sobre peligrosidad en pro de eliminar algunos de sus artículos, derogando entre ellos las referencias a los actos de homosexualidad, quedando en vigor los contenidos en la ley de escándalo público, que no será modificada hasta 1983, despenalizándose ya por completo en nuestro país el ser homosexual, transexual o bisexual. Pero ese no era más que el principio de una serie de reconocimientos de los diferentes derechos que asisten a estos colectivos, siendo poco a poco aprobados cambios absolutamente significativos en la vida legal de los mismos.

Los primeros avances en cuanto a poder regularizar su situación como parejas estables, al igual que en el caso de las parejas de hombre y mujer, fueron pequeñas leyes de las diferentes autonomías que iban concediendo el derecho de inscribirse en el censo como pareja de hecho a las parejas formadas por personas del mismo sexo, llegando el 2005 la tan esperada ley del matrimonio homosexual, permitiendo además la adopción a estos matrimonios. A pesar de haber sido muy polémica y haberse presentado alguna propuesta de derogación de la misma, 11 años después de su aprobación sigue en vigor y con pocos visos de que en algún momento pueda ser derogada. Harina de otro costal es, sin embargo, el derecho a la adopción por parejas del mismo sexo, aunque legalmente es posible, el hecho de que no haya muchos niños para adoptar en España y que generalmente haya que irse a países extranjeros para ello complica bastante las cosas, pues, desgraciadamente, son muy pocos los países que permiten la adopción de "sus niños" por parejas homosexuales, transexuales o bisexuales.

En cuanto a las personas transexuales, sus derechos también han sido reconocidos, siendo posible desde la Ley 3/2007, de 15 de marzo, reguladora de la rectificación registral de la mención relativa al sexo de las personas, el cambio del sexo en el registro civil tras la acreditación de que la persona ha sido tratada médicamente durante al menos dos años para acomodar sus características físicas a las correspondientes al sexo reclamado. Igualmente, está ya incluida en la seguridad social tanto estos tratamientos de adecuación como la cirugía de reasignación de sexo, pudiendo por tanto las personas que sienten que han nacido con un sexo físico diferente al psicológico cambiar su sexo de nacimiento por el que sienten que les corresponde.

Por tanto, España es actualmente uno de los países más avanzados legalmente en el apoyo de homosexuales, transexuales y bisexuales, y aunque socialmente aún le queda un poco por avanzar, podemos decir que dentro de nuestras fronteras actualmente estos colectivos no están desprovistos de apoyo legal, siendo iguales en derechos y deberes al resto de españoles heterosexuales.