¿Qué podemos hacer para que nuestra web cumpla con la ley?

Sin embargo pocas veces nos preocupamos de si esa página cumple o no los requisitos legales exigidos.

Estamos muy ocupados pensando el número de palabras que deben tener nuestros artículos para que Google nos posicione correctamente, si deben tener letras en cursiva, negrita, o si debemos incluir links a otros artículos de nuestra propia web o de otras webs bien posicionadas. Es decir, vigilamos celosamente el contenido de nuestra web para que todo sea PERFECTO, pero en la mayoría de ocasiones dejamos de lado el continente y, a pesar de conocer la legislación en cuanto a páginas web y oferta de servicios on-line, no incluimos en nuestra web cosas tan básicas como una política de cookies personalizada a nuestra web y servicios o una información correcta sobre la aceptación para el tratamiento de datos personales de nuestros clientes, o lo que es peor, lo copiamos de otras páginas webs.

Por ello, conscientes de la importancia que esto tiene para mejorar nuestra imagen corporativa digital, vamos a ofrecer unas pequeñas claves sobre qué es lo que podemos hacer para que nuestra web cumpla con la legislación actual.

Lo primero de todo, vamos a recordar que las leyes más importantes aquí son la Ley 34/2002, de 11 de julio, de Servicios de la Sociedad de la Información y de Comercio Electrónico junto con la Ley Orgánica 15/1999, de 13 de diciembre, de Protección de Datos de Carácter Personal, además de obviamente todas sus normas de desarrollo.

Dicho esto, vamos a empezar hablando de lo más básico de todo, los datos e información general que deben de aparecer en la propia web. Es obligatorio siempre el mostrar los datos propios o los de la empresa, domicilio, dirección de correo electrónico, número de identificación fiscal y datos del Registro Mercantil. Además, para el caso de los abogados se exige el número de Colegiado y el Colegio al que pertenece, el título que posee y el país en el que se expidió, así como las normas profesionales que se le aplican y los códigos de conducta a los que está adherido. En el caso de que se ofrezcan servicios profesionales en línea se debe siempre de incluir los precios, los impuestos aplicables a los mismos y las condiciones de contratación y pago. Todos estos datos deben de figurar en un lugar de fácil acceso dentro de la propia página web.

Además de esto, tampoco debemos olvidar la importancia de incluir el aviso de cookies en la primera capa de nuestra página web. Si, es cierto que ese aviso suele ser molesto para los propios clientes, que luchan por eliminarlo de su pantalla sobre todo en los dispositivos móviles, pero es un básico legal que debemos incluir y personalizar a nuestra página y los servicios que ofrecemos, pues esto dará una sensación de mayor profesionalidad al visitante. Pero no basta con incluir esa ventanita típica que salta y nos dice que la página puede instalar cookies en nuestro dispositivo, hemos de recordar que también es importante incluir una política de cookies adecuada para cumplir con la legalidad vigente.

Avanzando un poquito más, otra de las cosas más importantes es la política de protección de datos que aplicamos a los datos que recabamos. No debemos de olvidar que, en el momento en el que solicitamos a nuestros visitantes que nos faciliten datos como su dirección de correo electrónico para suscribirse a la newsletter por ejemplo, ya es obligatorio que se haga referencia a la existencia de un fichero de tratamiento de datos personales y se pida el consentimiento para la inclusión de sus datos en el mismo. Este aviso debe incluirla finalidad de la recogida de los mismos, las personas que van a tener acceso a ellos, si el suministro de los datos solicitados es obligatorio o no, así como las consecuencias de la negativa a suministrarlos, la posibilidad de acceso, rectificación, cancelación u oposición, y quién es el responsable del tratamiento del fichero. A este respecto, hemos de recordar además la obviedad de que el fichero que se anuncia realmente debe existir y constar registrado en la Agencia Española de Protección de Datos, pues esto es fácilmente comprobable por los clientes y si nos pillan en un renuncio esto va a perjudicar gravemente nuestra imagen. Además, de las evidentes sanciones que ello conlleva, lógicamente.

Todos estos detalles también hacen que nuestra web se vea mucho más profesional y da un fumusboni iuris con el que a cualquier profesional le gustaría contar. Por ello, os recomendamos ante todo que no sólo prestéis atención a vuestro contenido, pues el continente manda grandes señales inconscientes que hacen que los clientes terminen por no confiar en nuestra página web, además de que Google no termine de posicionarla de la forma que nosotros deseamos. Así que ya sabéis, si estáis pensando en abrir una página web, o ya tenéis una, revisad que cumplís con la normativa vigente, que los avisos, las políticas de cookies, las de contratación,...no están copiadas de otra página web, si no que se adaptan perfectamente a la vuestra y veréis como empezáis a mejorar vuestro posicionamiento SEO.